Calanda
Tipología o caracterización geográfica
Étimo
Ámbito semántico
Derivado
Resumen general
Calanda es un topónimo prerromano formado por la raíz indoeuropea *kal-, que contiene el valor semántico primario de ‘elevación’, y el sufijo *-nda, igualmente indoeuropeo.
Tradicionalmente, se ha identificado Calanda con la ciudad celtíbera de Colenda (Koλένδης) mencionada por el historiador griego Apiano (c. 95-c. 165). Sin embargo, esta identificación obedece únicamente a una semejanza fonética entre los dos topónimos, sin que exista ningún argumento historiográfico sólido que avale dicha identificación.
Aspectos geográficos, históricos, administrativos
Calanda es un municipio de la comarca del Bajo Aragón situado junto al Sistema Ibérico. El territorio está surcado por los ríos Guadalope y Guadalopillo. Aunque se ha sostenido que el lugar fue conquistado por el rey Alfonso I el Batallador en torno a 1119, la toma definitiva de Calanda tuvo lugar en 1169-1170 bajo el reinado de Alfonso II. En 1360 obtuvo la carta de población y pasó a depender de la Orden de Calatrava.
Información específica de étimo para este topónimo
Las interpretaciones propuestas para explicar el topónimo son escasas. Para Ventura (1972: 223), Calanda es un topónimo ibérico compuesto por la raíz cala-, “probablemente ‘cerro’, que aparece también en Calahorra y Calanda, cerro en la provincia de Gerona”, y el “sufijo -anda vascoibérico”, que se muestra “en Cutanda y Arganda”. Marco (1979: 161) incluyó Calanda dentro de los topónimos preindoeuropeos de la provincia de Teruel. Para Albaigès (1998: 160), “el prefijo Cala- sugiere una fortaleza árabe” similar al que se observa en Calatayud.
La interpretación de Calanda es compatible con una base léxica indoeuropea *kal- que, a falta de más precisiones, contiene los valores semánticos primarios de ‘elevación’ o de ‘resguardo, protección’, y un mecanismo derivacional igualmente indoeuropeo (*-nda). Como se recoge en Madoz, Calanda está situada “a la izquierda del río Guadalope, no lejos del punto en que confluye con este el arroyo Guadalopillo, en una llanura circundada de montes” (DicMadoz, 5, p. 250).
Morfológicamente, la raíz *kal- aparece en formaciones básicas (kalā, kalyā, kalo, kalyo), en compuestos a partir de formas básicas (estas formas básicas aparecen como primer término de compuestos en topónimos cuyo segundo miembro es a menudo celta: Caladunum, Calabria) o derivados mediante distintos sufijos indoeuropeos: -ko- (Calacum), -kulo- (Calecula), -uko- (Calucones), -sko- (Calasca), -no- (Calone) o, como en el caso que nos ocupa, -nto- (Villar_2011: 315-319, s. v. serie kalo-, kalano-, kalanto-). Este sufijo cuenta con notables paralelos tanto peninsulares (Aranda, Arganda, Cutanda) como extrapeninsulares (Girandas [Lituania]; Mammaranda, Marassanda, Puranda, Sijanda [Anatolia]; Socanda [Irán]) (Villar_2011: 369, Serie hidrónimos -ndo-). Interviene también en topónimos e hidrónimos con resultados romances: Arlanza, Arganza, Carranza (Hoz_1963: 227-242).
Documentación histórica
Antigua e medieval
- “Quingentos Morabetinos Alphonsinos pro filio Petri Eximeniç de Calanda” 1245, mayo 9 (García Miralles, 1969, doc. 2, p. 194).
- “et fratres de Calatrava expellant sarracenos de predicto loco, qui dicitur Calanda, quam citius poterint, et populent dictum locum de Calanda” 1277, enero 21, CPRA, doc. 219, pp. 271.
- “y con termino de Calatraba, y Monroyo, y la Cañada, y con Alcañiz y con Calanda” marzo de 1291, CPRA, doc. 230, p. 283.
- “…cómo yo, Abengayl, moro, estant en Calanda”; “et Alcaydia de Calanda e los bienes rendidos e exidos del dicho lugar de Calanda” 1316, febrero 10 (García Miralles, 1969, doc. 5, p. 197).
- “in terminis que loca sunt Favara, Maeylla, Calaceyt, la Faixneda, Calanda, Foç et Castro Sera” 1328 julio 5 (García Miralles, 1969, doc. 6, p. 198).
- “jurados et homes buenos de ditto lugar de Calanda” 1360, abril 6, CPRA, doc. 243, pp. 307-308.
- “Calanda et Foz Calanda sita in Regnum Aragonum” 1451, mayo 9 (García Miralles, 1969, doc. 8, p. 201).
Moderna
- En el acto de población de la villa de Calanda procedente del registro de actos comunes del Justicia de Aragón se cita a los “vicinorum et habitatorum villae Calanda” 1605, julio 13 (García Miralles, 1969, doc. 14, p. 218).
- En 1640 Felipe IV concedió ferias a la villa de Calanda: “sane pro parte villae de Calanda in nostro Aragonum Regno” 1640, abril 20 (García Miralles, 1969, doc. 16, p. 227).
- En la sentencia del celebérrimo “Milagro de Calanda”, firmada el 27 de abril de 1641 por el arzobispo de Zaragoza Pedro de Apaolaza, se lee: “Decidimos, pronunciamos y declaramos que a Miguel Pellicer, natural de Calanda, de quien en este proceso se trata, le ha sido restituida milagrosamente su pierna derecha, que antes le habían cortado, y que tal restitución no ha sido obrada naturalmente, sino prodigiosa y milagrosamente” (a partir de la página web [consulta: 24/12/21] de la catedral de Zaragoza).
en Toponimia de Aragón, Cantabria y La Rioja (PID2020-114216RB-C63), proyecto integrado en el Toponomasticon Hispaniae, financiado por el MCIN/AEI/10.13039/501100011033/. https://toponhisp.org/