El topónimo presenta el interés de mostrar un diminutivo en -ejo procedente de lat. -(Ĭ)C(Ŭ)LU añadido al término común villar, de significado "villa pequeña", "población pequeña". Puede muy bien haber sido una derivación toponímica, esto es, haber sido formado a partir de un topónimo anterior llamado Villar, pero también puede ser un diminutivo propio acentuando el significado secundario de "poblado pequeño" que tiene ya villar y que, sin duda, fue perdiendo prácticamente con el paso del tipo. Así pues, digamos que el significado originario es "aldea pequeña". Se señala que el segundo elemento del compuesto toponímico proviene de la existencia de un antiguo núcleo de población así llamado, situado en el actual valle de San Pedro, dentro del término municipal. Este núcleo fue habitado desde la Edad Media y, tras su abandono progresivo, sus habitantes se trasladaron a un nuevo asentamiento cercano, que pasó a denominarse "Villarejo de Salvanés" en referencia a su procedencia. Con todo, nada mínimamente seguro sabemos decir en torno al origen de esta forma "Salvanés". Se podría considerar la posibilidad de que se tratara del antiguo antropónimo latino SĬLVĀNUS, presente con seguridad en el apellido catalán Salvà a partir de una forma de genitivo *SĬLVĀNIS, pero sorprende la posición del acento.