Es un topónimo de gran interés. Es, evidentemente, lo que parece ser, aunque el detalle puede escaparse. Queremos decir que se trata de un diminutivo de casa o casar y rubio, rubia, aunque es claro que, en principio, al hablante que lo examine le sorprende el género masculino y el plural. Una primera explicación, de importancia, es que el diminutivo, estrictamente hablando, no lo es de rubio, rubia sino del topónimo entero, pues es un diminutivo de los que llamamos "replicante", esto es, formado a partir de otro topónimo, un diminutivo del topónimo en su totalidad. En este caso es fácil pues la localidad a partir de cuyo nombre se formó este topónimo, con sufijo diminutivo, es la vecina Casarrubios del Monte. A pie y por el camino más corto no debe de haber más de 15 km., quizá menos. Así pues, Casarrubuelos es sencillamente el Casarrubios pequeños. A su vez, por supuesto, habría que explicar Casarrubios, un compuesto relativamente claro, para cuya explicación se remite a este topónimo directamente, pero que parece un compuesto de casar y rubio, es decir, "villa roja", entendiendo que la forma en plural es secundaria, cosa probable, pero no segura.