Cognados

Los cognados, si por tal entendemos topónimos que presentan el adjetivo "cojo", "coja", se cuentan por centenares. Si entendemos, sin embargo, por cognado más directo el caso de la utilización del adjetivo con otro antropónimo, esto es, casi como apellido, son obviamente mucho menos frecuentes. En algunos casos es posible que se haya utilizado el adjetivo no aplicado a personas, sino metonícamente a objetos, edificaciones, árboles, casas, montes, etc., pero en la inmensa mayoría de los casos se trata de usos del adsjetivo en su significado propio, empleado para referirse a personas aquejadas de la patología de la cojera, en mayor o menor medida. 

Comenzando por los más cognados más directos es de interés, nos parece, la repetición, exactamente igual, del topónimo Pedro Cojo en Marcilla de Campos y en Cardeñosa, también en Ávila este segundo caso. Muy similar es, en todo, Perocojo (Abades, Segovia), cuyo origen antroponímico se comprueba por la presencia cerca de Molino de Perocojo, también Pericojo (Berrocal de Huebra, Salamanca), con una evolución de /o/ en composición a /i/ similar a la que se constata en casos como Sanchinarro (Madrid) o en Sanchituerto (variante de Sanchotuerto) o mejor aún Arroyo de Sanchicojo (Quintana Redonda, Soria). Puede añadirse otros casos como Antoncojo (isla de La Gomera, Sta. Cruz de Tenerife) o Barranco de Juan Cojo (Cehegín, Murcia), etc.

En una segunda instancia, como se ha señalado, comprendiendo cualquier uso del adjetivo, los ejemplos son muchos centenares y hacen referencia a todo tipo de edificaciones, propiedades, valles, montes, cerros, fuentes, etc., vinculados a personas cojas. Como hemos señalado también con anterioridad no se puede excluir, en casos de ausencia del artículo ante el nombre, que el adjetivo se haya aplicado metonímicamente a cosas, pero ello ocurriría en pocas ocasiones. A título de ejemplos, señalemos algunos de etsos centenares de topónimos, elegidos un tanto al azar, como Arroyo del Cojo (Vejer de la Frontera, Cádiz), Borda del Cojo (Aragüés del Puerto, Huesca), Barranco del Tío Cojo (Valdecuenca, Teruel), Casa de Blas el Cojo (Lorca, Murcia), Casa del Cojo Luque (Aguilar de la Frontera, Cádiz), Cerrillo del Cojo (Medinaceli, Soria), Cerro del Cojo (Baza, Granada), Cojos de Robliza (Robliza de Cojos, Salamanca), Cortijo de los Cojos (San Lorenzo de Calatrava, Ciudad Real), El Llano del Cojo (Barajas de Melo, Cuenca), Fuente de Valdelcojo (Almeida de Sayago, Zamora), Hoya del Cojo (Motril, Granada), Jarilla de los Cojos (Cózar, Ciudad Real), Valdecojos (Valle de Santibáñez, Burgos), etc.  Hay, por supuesto, formas femeninas, como Altillos de la  Coja (Ocentejo, Guadalajara), Cerro de la Coja (Santa Cruz del Retamar, Toledo), Cortijo de la Coja (Íllora, Granada), Valdelacoja (Grisaleña, Burgos), etc.