La documentación antigua a nuestra disposición, abundante, permite asegurar la aparición de común castellano villa como primer elemento. El segundo es claramente un antropónimo, no un adjetivo que indicara cualquier característica de esa villa. Aparece, pues, la típica estructura de villa+ nombre de propietario o fundador. El antropónimo, a juzgar por los testimonios antiguos, debe de haber sido Ismael, bien en esta forma, bien en cualquier variante. Parece haberse añadido posterior una vocal final /o/, claramente masculinizadora en castellano. la evolución fonética es pues algo así como *Villa (de) Ismael > Villaesmal(o) > Villizmal(o) > Villizmalo> Vizmalo. En la zona hay otros topónimos del mismo tipo, en los que nombres típicamente árabes o hebreos aparecen junto al sustantivo villa. Durante muchos siglos nio necesariamente los portadores de nombres de origen hebreo o árabe lo son.